El presidente saliente de Brasil, Jair Bolsonaro, pidió este miércoles que sus militantes despejen las rutas de todo el país después de al menos tres días de piquetes y manifestaciones en rechazo a su derrota electoral del domingo pasado, cuando perdió en el balotaje contra Luiz Inácio Lula da Silva.
Aunque aseguró que las protestas son «bienvenidas» y forman parte del «juego de la democracia», Bolsonaro se refirió al daño económico que podría sufrir Brasil si siguen los cortes de ruta. Por eso, en un escueto mensaje de Twitter, el todavía mandatario instó a sus seguidores a entrar en razones.
Bolsonaro también se hizo eco de que si militancia está «triste y decepcionada» por el resultado del domingo pasado frente al PT encabezado por Lula da Silva, pero aseguró que su fuerza política siempre estará «dentro de los lineamientos de la Constitución».
«Brasileños que está protestando por todo Brasil: sé que están decepcionados, están tristes, esperaban otra cosa. Yo también. Estoy decepcionado y triste como ustedes, pero tenemos que poner la cabeza en su lugar. Las protestas, las manifestaciones, son muy bienvenidas y forman parte del juego democrático», dijo Bolsonaro antes de citar ejemplo en todo el país.
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«Pero hay algo que no es legal: la obstrucción de rutas del Brasil perjudica el derecho de las personas de ir y venir», sentenció.