En una reciente medición de la Prefectura Naval Argentina, se informó que el nivel del Río Paraná alcanzó los 5,05 metros, lo que genera consecuencias significativas en las zonas costeras. Numerosos comercios a lo largo de la ribera se ven afectados por las inundaciones, como se constató en un quincho comedor ubicado en Puerto Sánchez y en las instalaciones del Paraná Rowing Club (PRC) en la costanera de la ciudad.
En este sentido, José Cardozo, propietario del quincho comedor en Puerto Sánchez, expresó su preocupación ante la falta de ayuda municipal: «Estamos esperando la ayuda de la municipalidad que se comprometió a mandarnos una máquina con tierra y nunca la mandó». La creciente impacta negativamente en la zona de Puerto Sánchez ya que, en menos de un mes, muchos quinchos estan siendo afectados por la crecida.
“El quincho hace más de cuatro años que lo tengo y tuve que cerrar una parte porque una grieta que se abrió en el suelo hizo que el quincho cediera; esto va a volver a pasar ahora cuando la crecida baje”, afirmó Cardozo.
Cardozo mencionó con ironía la posibilidad de pescar dentro del quincho debido al aumento del nivel del agua. Su hija agregó optimismo: «Hay que seguir adelante, solos y en familia trataremos de reconstruir el lugar».
A pesar de las dificultades, Cardozo y su familia continúan trabajando: “Nosotros seguimos atendiendo y tratando de brindar el mejor servicio, pero pedimos por favor que desde la municipalidad nos ayuden con tierra y una maquina”, concluyó Cardozo.
Paraná Rowing Club
En tanto, el comedor del PRC sobre la costanera de la capital entrerriana también sufrió las consecuencias de la crecida del río Paraná. Dos socios de la institución deportiva dieron su parecer.
«Estamos entrenando un poco, combatiendo las vicisitudes de la creciente. Lamentablemente complicó la zona de parrillas y quincho, pero pensábamos que no iba a llegar y hay que acomodarnos hasta que empiece a bajar», manifestó un kayakista.
A su vez, otro deportista del club expresó: «Hacía rato que no veíamos una creciente de esta manera. Habíamos tenido un fenómeno contrario que duró mucho tiempo, pero las personas del Rowing no vamos a dejar de remar».
Con respecto a la playa que da al río, indicó: “Es un problema menor en relación de lo mal que la están pasando las comunidades ribereñas, ya que realmente están sufriendo con la subida del agua».
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«Dicen que este es el pico, donde si no viene ninguna lluvia fuerte aguas arriba, es de esperar que no crezca mucho más. Es la información que tenemos», finalizó.