Después de algo más de tres meses detenido en la DDI de Quilmes acusado de privación ilegítima de la libertad agravado por el uso de armas de fuego, en la noche del viernes L-Gante recuperó su libertad y ni bien pisó la calle se mostró con el pelo más largo, barbita candado y algo reflexivo, antes de ir directo a reencontrarse con su hija Jamaica y su ex, Tamara Báez.
“Se hará justicia. Estar preso obvio que no está bueno, pero estar acá es más que nada para recapacitar y aprovechar el tiempo para pensar de buena manera”, aseguró ante la prensa que lo esperaba ni bien se confirmó su liberación.
Fueron entonces sus amigos quienes llevaron al cantante urbano directo a General Rodríguez para reencontrarse con sus afectos: su hija Jamaica y su ex Tamara Báez.
Como era de suponer, Tamara grabó el momento en que L-Gante y Jamaica volvieron a verse a pura emoción, donde la nena corrió a los brazos de su papá junto a su monopatín y le mostró todos los stickers que le pegó a su pequeño rodado,
El corte de la libertad
Otro de los pedidos que L-Gante le hizo a su amigo y manager, Maxi El Brother, el encargado de ir a buscarlo a la DDI de Quilmes, fue cortarse el pelo esa misma noche.
Fue así que tras el abrazo y la primera charla con su hija y su ex pareja, que lo bancó en todo sentido durante estos 100 días, al referente de la cumbia 420 lo esperaba un peluquero con las tijeras afiladas para recuperar su look.
“Después de la cárcel, el corte de la libertad. Ahora a comerse el mundo, paaaa”, escribieron desde una Instagram Storie de Dajaga Barbershop, compartiendo el paso a paso que luego el propio L-Gante sumó a sus historias virtuales, lo que demuestra que ya recuperó el control de sus redes sociales.
En tanto, otras de las declaraciones del músico al momento de recuperar la libertad fue admitir que de ahora en más tendrá más cuidado en todo sentido. “Voy a cuidarme un poco más y no darle oportunidades a las cosas malas. Le voy a meter a todo lo que a mí me gusta”, concluyó antes de subirse al auto que lo esperaba para comenzar una nueva etapa en su vida.