Daniel Celis tenía una condena de siete años y medio de prisión por el violento asalto a una familia en la zona rural del Departamento Diamante, y otra de 13 años de prisión por narcotráfico. El Tribunal Oral Federal de Paraná las unificó en 15 años y seis meses, pero el jefe narco insistió en que debe cumplir una pena única y total de 13 años, por lo que acudió a la Cámara de Casación Penal.
Ahora, los camaristas de Comodoro Py le rechazaron el planteo. De este modo, se confirmó que Celis terminará de cumplir su condena en febrero de 2032, aunque podría salir con libertad condicional unos años antes.
El recurso recayó en la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal integrada por Mariano Borinsky, Javier Carbajo y Ángela Ledesma.
Argumento
El defensor Augusto Lafferriere argumentó que desde la fecha en que se encuentra detenido Celis (19 de agosto de 2016) “lleva más de cuatro años privado de su libertad y tiene ya cumplidas las tres cuartas partes de la primera condena” y “ha transitado su estadía carcelaria siempre con buena conducta, laboralmente ocupado y cursando diversos estudios”.
“Más allá de los graves hechos por los que fue condenado -agregó-, Celis ha demostrado que tiene efectivamente posibilidades de reinsertarse socialmente”.
Pedido
Cabe recordar que en la instancia de discusión de la unificación de penas en el TOF de Paraná, el fiscal general José Ignacio Candioti, pidió que la sanción que debía imponerse en total a Celis era de 18 años y seis meses de prisión, por tratarse de dos hechos delictivos con demasiados agravantes, como lo fue el asalto furtivo a mano armada a la familia rural, la operación de la narcoavioneta que aterrizó en Colonia Avellaneda con 317 kilos de marihuana y el comercio de cocaína.
Los camaristas de Casación subrayaron el análisis hecho por los jueces de Paraná al momento unificar las penas en 15 años y medio de prisión: “Se trata de infracciones de particular gravedad e intensa dañosidad social”, citaron de aquel fallo.
Fundamentos
En particular, el vocal Carbajo apuntó que los delitos cometidos por el “Tavi”, afectaron la propiedad privada, la libertad, la administración pública y la salud pública. También citó del TOF: “la ingente dañosidad social de este último delito, con Celis en calidad de organizador de actividades de narcotráfico, dada la capacidad expansiva del tóxico –tanto en nuestra ciudad como en zonas aledañas- y la especial aptitud que, para ello, tenía la organización que lideraba y que se había enquistado en la estructura institucional municipal, haciendo uso ilegítimo en su provecho de recursos estatales; y (…) que, para la época de la comisión de los hechos, el condenado transitaba un rango etario catalogable como de mediana edad (entre 40 y 43 años), explotaba negocios lícitos que le aseguraban una vida desahogada y sin sobresaltos para sí y todos los suyos”.
De este modo, a Celis le queda la posibilidad de recurrir ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, aunque difícilmente lo haga por la casi imposibilidad de revertir la situación.