La investigación para esclarecer el homicidio de Adrián Martínez, ocurrido en la noche del jueves 9 de marzo en Paraná, continuó en las últimas horas con el secuestro de un vehículo y la posterior detención del dueño del rodado, que estaría sospechado en el hecho de sangre.
Martínez fue asesinado por los disparos de un arma de fuego 9 mm y, según algunos testigos, tres personas que se trasladaban en una Ford EcoSport color azul oscuro, fueron los responsables del hecho.
La víctima fue acusada de ser la responsable de algunos ilícitos en la zona de San Agustín, lo que, según los investigadores de Homicidios, podría haber provocado el malestar para que lo buscaran para «ajusticiarlo» por haber afectado en un robo calificado a una determinada persona. Además, se lo vinculó a otros delitos ocurridos en la zona oeste.
Cabe recordar que el hombre hacía poco tiempo había salido del penal de Paraná.
En el marco de la investigación para esclarecer el crimen, personal del 911 localizó este sábado un vehículo Ford EcoSport en la estación de servicios Puma de calles Larramendi y Anacleto Medina, en Bajada Grande, confirmaron fuentes policiales.
El rodado fue secuestrado y será sometido a distintas pericias por parte de la Dirección de Criminalística, con el fin de buscar elementos probatorios.
En tanto, el dueño de la Ford EcoSport se presentó por la tarde en la División Homicidios; estaba enojado porque le habían secuestrado el vehículo.
Con esta novedad, desde la Fiscalía interviniente, se ordenó la detención del hombre de 42 años, hasta tanto se aclare su situación, mientras se logran afirmar las sospechas por su posible intervención en el homicidio.