Después de 3 horas de tensión, diálogo y negociación, un joven llamado Marcos, bajó de una antena de 30 metros en la zona de calles Blas Parera y Don Bosco de Paraná.
Según trascendió, el muchacho se había comunicado unas horas antes con sus familiares para advertirles de la decisión que había tomado. Un hermano llegó hasta la zona y, junto a personal policial, dialogaron con el joven para que desistiera de su actitud.
El hecho provocó que, preventivamente, la Policía cortara en el tránsito en la intersección de las dos transitadas avenidas. Allí se encuentra un predio donde se levanta una enorme antena, de propiedad y jurisdicción de Transener SA, la compañía de Transporte de Energía Eléctrica en Alta Tensión. Así lo consignó la empresa Enersa en un comunicado difundido esta tarde.
Minutos después de las 15, llegó al lugar el mediador de la Policía que subió a la estructura de hierro para dialogar con el joven. Cuando se percató de la presencia del oficial, el joven decidió seguir subiendo para alejarse del efectivo hasta alcanzar una altura cercana a los 30 metros.
Finalmente, después de, al menos dos horas de charla y negociación, el muchacho aceptó bajar. Asistido por los efectivos de la fuerza, el joven fue trasladado por una ambulancia hacia un centro de atención médica en esta ciudad.