La labor de un grupo de investigadores determinó el hallazgo de un caso poco común de úlcera genital en una niña. Colaboraron trabajadores de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) y del Hospital Pediátrico “Juan Pablo II”.
El caso registrado es una úlcera genital aguda (úlcera de Lipschütz) que resulta infrecuente. Se caracteriza por la aparición de úlceras genitales en menores de edad que no iniciaron su actividad sexual.
Este caso habla de una niña de un año y tres meses a la que atendieron en el servicio de Anatomía Patológica y Citología. Según resaltaron los investigadores, no existe bibliografía de una paciente de esta edad con esa enfermedad.
Diagnóstico
En Pediatría recibieron a la niña con un diagnóstico de síndrome febril prolongado, inmunodeficiencia primaria a descartar, tuberculosis de sospecha y desnutrición grado I. Además la niña tuvo registros febriles, úlceras en mucosa oral y vulva de dos meses de evolución. En el examen físico, la paciente también presentó úlceras bilaterales con patrón “en espejo” en ambos labios de la vulva y la sometieron a estudios serológicos.
Desmejora y traslado
Luego de los primeros cuidados, el cuadro de la niña con úlcera genital desmejoró en Corrientes. Sufrió de insuficiencia respiratoria y tuvo signos clínicos de shock séptico, con inestabilidad clínica y hemodinámica. Debido a esta situación la derivaron al Hospital de Niños “Dr. Ricardo Gutiérrez” de Buenos Aires, en donde la estudiaron y estabilizaron.
El informe clínico busca diferenciar a este cuadro de otros con la presencia de úlceras. Existen úlceras de origen infeccioso venéreo (sífilis, herpes simple, linfogranuloma venéreo, cancroide) y no infeccioso (enfermedad de Crohn, enfermedad de Behçet, pénfigo vulgar, liquen escleroso, aftosis idiopática, eritema fijo a medicamentos, eritema multiforme).
Todas estas enfermedades tienen implicancias en el pronóstico y la terapia, por lo que se necesita una exhaustiva evaluación médica. De esa manera descartarían etiologías desconocidas y buscarían otras manifestaciones (oftálmicas, neurológicas, digestivas, cutáneas, orales y genitourinarias).
En su conclusión, el reporte indica: “El diagnóstico de la úlcera genital aguda es un diagnóstico de exclusión, basado en el cuadro clínico y negatividad de exámenes”.
Los especialistas añadieron que la úlcera genital aguda puede no estar ligada a la transmisión sexual. Además, requiere la derivación a diversos especialistas para su análisis (dermatólogos, ginecólogos, infectólogos o reumatólogos) antes de su diagnóstico.
Citomegalovirus
En este caso dieron con la presencia de citomegalovirus en el lavado broncoalveolar realizado a la paciente. Esto concuerda con el posible origen viral planteado en el estudio de la muestra y el diagnóstico realizado por el dermatólogo, señala El Litoral.
El informe médico lo firmaron: Azul Milena Maccio, Marcelo Pessini Mierez, Diana Elizabeth Sarli, Jessika Susana Aymará Navarro López, Marilina Gladys Sassari Sandoval y Bertha Mercedes Valdovinos Zaputovich.