Usualmente relacionado con los emprendimientos, se supo en las últimas horas que Elon Musk compró un porcentaje de la red social Twitter. Se volvió accionista con la propiedad del 9,2% de la compañía. Esta inversión se realizó el pasado 14 de marzo, según confirmó este lunes la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos.
Esta inversión convierte a Musk en el máximo accionista de la compañía valorada en unos 3.000 millones de dólares. De todos modos, debe tenerse en cuenta que tras conocerse la noticia de la compra parcial de Musk, sus acciones subieron.
De todos modos, lo llamativo de la cuestión es que yendo atrás en el tiempo se puede observar en esa misma red social una queja del magnate y empresario. El 25 de marzo, 11 días después de la adquisición de las acciones, Musk lanzó una encuesta en su perfil personal de la red social.
“El discurso libre es esencial para una democracia en funciones. ¿Crees que Twitter adhiere rigurosamente a este principio?” consultó. La respuesta fe un amplio no con el 70,4% de votos a favor (en total participaron 2.035.924 usuarios).
El empresario advirtió que la encuesta traería consecuencias y que serían importantes, por lo que pidió a las personas que cuiden su decisión. Poco después de esto se especuló con la posibilidad del lanzamiento de una nueva red social, pero con los últimos acontecimientos el rumbo parece ser otro.
Musk explicó en otro tweet posterior a la encuesta qué opina sobre la red social Twitter en la actualidad. Describió que funciona en los hechos como una plaza pública y si falla en adherir a los principios de la libertad de expresión, socava la democracia. Con esta frase apuntó a la censura que ejerce esta red social ante algunas publicaciones.
Relacionado a todo esto, también parece estar en desacuerdo con la elección del nuevo CEO de Twitter, Parag Agrawal. El indio nacido en Ajmer, Rajashtan en 1984 llegó para reemplazar a Jack Dorsey, amigo personal de Musk.
Esto pareció no sentar bien al billonario que publicó un meme en su perfil personal en el que muestra a Agrawal como a Joseph Stalin (el dictador soviético). En la imagen se lo ve a Dorsey además como el jefe de la policía secreta soviética, Nikolai Yezhov, a quien arrojan al agua.
Quedará por ver en el futuro los motivos por los que Musk compró Twitter, la injerencia que tendrá en sus movimientos y si realmente está decidido en cambiar la orientación de la red social.