En la madrugada de este viernes, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, confirmó que la policía logró rescatar a la familia que había sido tomada como rehén por un exoficial de la Policía Federal.
“Pudimos realizar una operación limpia. Se procedió a efectuar un operativo de distracción para poder rescatar a los rehenes que están bien y no sufrieron heridas. Ese era nuestro principal objetivo. Ahora seguimos negociando con el agresor”, explicó el funcionario.
Walter Ariel Moreno, es un expolicía de la Federal y del grupo GEO, que había tomado de rehén a su familia desde las 19:20 hasta las primeras horas de este viernes. Según las autoridades las víctimas estuvieron cautivas durante más de cuatro horas.
El agresor mantuvo secuestrada a su familia amenazándolos con dos armas de fuego en su casa situada en Soldado Moreno al 2200, en Isidro Casanova. A ese lugar llegó el grupo Halcón, que junto con equipo de especialistas continúa negociando con el agresor que permanece atrincherado.
Según testimonios de algunos vecinos, el conflicto habría comenzado por una discusión por celos por parte de expolicía hacia su mujer, a quien mantuvo cautiva junto a su hija de 25 años bajo la amenaza de “matar a todos” si la policía no se retiraba del lugar.
Ante la discusión que se sucedió por la tarde, Nicolás Moreno, uno de sus hijos, logró escapar y dio aviso al 911. En el llamado advirtió que su padre tenía problemas de adicciones. Según pudo saber TN, ese habría sido el motivo de salud por el cual lo echaron de la Fuerza Federal. También indicó que su padre tenía dos armas de fuego con las que amedrentó a la familia.
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Según se pudo saber, gracias a fuentes policiales y testimonios de los vecinos de la zona, el hombre se encuentra muy “exaltado” y pide fervientemente que “se vayan los agentes” si no “va a hacer una masacre”.
Belén, una comerciante de la zona, habló con TN y dijo que el problema entre Moreno y su mujer comenzó a la tarde del jueves. El operativo policial se mantiene en el lugar con el objetivo de negociar con el agresor para que se entregue. También circuló una versión que sostenía que el expolicía amenazó con suicidarse para evitar que lo detengan.