La localidad tucumana de Amaicha del Valle fue noticia por un inaudito funeral que realizaron en el estadio de fútbol del club San Ramón de Los Zazos, donde familiares, amigos y compañeros de Inti Castillo Segura, arquero del equipo que falleció en un accidente de tránsito, lo despidieron de una forma un tanto insólita.
El hecho que desencadenó la muerte del golero ocurrió el domingo 31 de octubre a las 21.30, cuando circulaba en su moto Yamaha YBR de 125 cc. por las cercanías de ex Cabramarca. Según informó la policia, Castillo andaba acompañado de Lorena Iris Mamani (31) y un niño de 5 años de edad. El vehículo habría embestido a un caballo.
Muy golpeado
A raíz del choque, Segura sufrió un traumatismo de cráneo severo que le hizo perder su ojo derecho. Había sido atendido en el hospital Luis Alberto Vargas y luego derivado a la capital tucumana al Hospital Ángel Padilla, donde se tratan pacientes de alta complejidad. Los esfuerzos de los médicos no fueron suficientes para mantener los signos vitales y el martes pasado falleció.
Con lo que respecta al peculiar velorio, comenzó a la noche con una prolongada caravana de vehículos que seguía al coche fúnebre. Al día siguiente, todo el pueblo norteño se movilizó: en una atmósfera de emoción y dolor, pero que también contó con el colorido de los bombos y las trompetas propias del folklore del deporte rey, cientos de personas que lucían casacas rojas y amarillas del club San Ramón llevaron al féretro hasta el verde césped en el que Inti desplegaba toda su destreza bajo los tres palos.
Despedida
El ataúd lo colocaron sobre la línea de meta y bajo los tres caños que habitualmente custodiaba. Uno por uno varios de sus compañeros de equipo fueron acercándose para patearle un último penal a Castillo. Luego, los amigos y familiares se abalanzaron al cajón entre lagrimas desconsoladas para darle el abrazo de despedida. Sin embargo, la despedida del joven continuó por los montes de Amaicha del Valle hasta la Iglesia Santa Rita, donde se celebró una misa dedicada a él. Para finalizar, la ceremonia finalizó en el cementerio local.