La búsqueda de Oscar Arduino de 76 años, se profundizó este lunes, no solo con los rastrillajes de perros adiestrados, sino que se unió en el trabajo operativo en el río Paraná, sobre la costanera de la capital entrerriana, una embarcación arenera.
La búsqueda inició el 3 de enero, cuando la Unidad Fiscal de Paraná solicitó la colaboración para dar con el hombre de 76 años que se ausentó de su domicilio. La última información que obtuvo su familia fue que «tomó el colectivo 22, coche número 2.284 que va por Avenida Almafuerte hacia el centro» y al momento de retirarse de su vivienda «vestía remera a rayas, bermuda beige y gorro blanco».
Luciana Arduino, hija de Oscar, había informado días atrás que la búsqueda se trasladaría a Cerrito ya que «seguimos todas las pistas que van surgiendo e iremos para saber si hay alguna pista ahí. Mi padre nació en Antonio Tomás y tal vez alguien tiene algún dato».
Por otro lado, la segunda jefa de la Comisaría Tercera indicó que una cámara en las cercanías del parque Urquiza lo captó en una breve aparición el mismo día martes» e informó que se coordinaron acciones con Prefectura y otras áreas internas de la Policía «para abordar todos los frentes posibles en la búsqueda de Arduino».
Asimismo, Luciana destacó que Oscar se retiró «con el carnet de Pami, tarjeta de crédito, documento y celular, que se apagó a las 11:28 de ese día» y remarcó que su padre tiene problemas de Alzheimer, por lo que podría desorientarse.
Búsqueda en el río Paraná
Aún no hay ninguna pista sólida que pueda determinar su paradero. Sin embargo, este lunes, personal de la Dirección de Investigaciones, luego de obtener más registros fílmicos de cámaras de seguridad de la zona de la costanera, sumado al trabajo de rastrillaje en la zona por parte de perros adiestrados que marcaron en un determinado sector de la costa del río Paraná, pidió la colaboración de un barco arenero.
El navío fue el medio propicio para mover una espesa isla de camalotes que se encontraba entre el Club Rowing y la escuela de Aerobismo de Paraná. Con pesados tubos y caños que impulsaban agua hacia los vegetales lograron abrir en varios sectores la unidad verde que se había concentrado sobre la costanera.
En la hipótesis, se quiere descartar o profundizar la idea que por motivos que se desconocen, el hombre pudo haber caído al río. Ese sector cuenta con históricas estructuras de postes y hierros donde podrían calzarse elementos que caen desde la superficie del río.
El trabajo continuará este martes con la supervisión de Prefectura Paraná, que inspeccionará y visualizará si aparece algo de interés que permita aclarar la desaparición del hombre, publica diario Uno.
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