En el marco de la pandemia de coronavirus, las reuniones sociales no permitidas en domicilios particulares siguen siendo moneda corriente en la provincia. En la madrugada de este domingo personal policial debió intervenir en fiestas clandestinas.
Personal de diferentes comisarías asistió a al menos seis viviendas de distintas zonas de la ciudad, notificando a decenas de asistentes.
En una de las fiestas clandestinas que llamó la atención, el personal de Comisaría Tercera, constató que había 90 personas mayores y 10 menores de edad.
Pasadas las 5.30 de este domingo, los efectivos fueron comisionados por la sala 911 a calle Febre de Paraná, por una supuesta fiesta clandestina, que estaba incumpliendo el Decreto de Necesidad y Urgencia del Poder Ejecutivo Nacional N° 411/21.
Al llegar los funcionarios policiales observaron que en la vivienda, había una gran cantidad de personas y música alta.
Al ser atendidos por el propietario de la casa, manifestó que estaba en una reunión y aclaró que, en ese momento, finalizaría el evento.
Los efectivos notificaron a los 100 concurrentes, entre ellos, 90 mayores y 10 menores de edad que fueron entregados en el lugar a sus progenitores.
Además, secuestraron «una consola de sonido, un parlante, 47 botellas vacías de vidrio de bebidas alcohólicas, 30 botellas de plástico, 15 botellas de bebidas alcohólicas llenas, como así también un cuchillo, una picadora y vaso.
Además, se procedió a la retención de seis motos pertenecientes a los participantes de la misma de la fiesta, por infracción a la Ley de tránsito.