El juicio comenzó a principios de mayo y este lunes por la noche llegó deliberación final en donde encontraron culpables a los cuatros policías acusados por la Masacre de Monte que tuvo lugar en 2019. En esa ocasión, Danilo Sansone, Gonzalo Domínguez, Aníbal Suárez y Camila López perdieron la vida tras una persecución.
El veredicto constó de ocho páginas tras una decisión por parte del jurado popular y la lectura tuvo lugar en la Sala del Tribunal Oral en lo Criminal N°4 de La Plata a cargo de la jueza Carolina Crispiani. Entrentanto, los familiares de las víctimas de la Masacre de Monte esperaron frente al lugar y junto a ellas había aproximadamente 150 personas concentradas en las afueras en símbolo de “abrazo simbólico”.
En primer lugar, Leandro Ecilape y Rubén Alberto García fueron sentenciados a cadena perpetua y su situación quedó enmarcada en un “homicidio agravado por el abuso de la función o cargo policial, y por ser cometido mediante arma de fuego”.
Ahora bien, Mariano Ibáñez y Manuel Monreal podrían recibir entre 15 a 20 años de cárcel por la “tentativa de homicidio agravado por el abuso de la función o cargo policial, y por ser cometido mediante arma de fuego”. Justamente, ellos dos fueron los últimos en hablar ante la presidnete del Tribunal.
Las declaraciones de los policías culpables por la Masacre de Monte
Monreal sostuvo: “Ese día entró un llamado por un supuesto robo y pedían un móvil para constatar. Pasaron 15 minutos y no teníamos novedades, así que Ibáñez me dijo de ir a revisar la zona. Nos encontramos con el móvil de García y Ecilape en la zona de Costanera y nos pidieron apoyo para identificar un vehículo. Dimos la vuelta en U, divisamos un auto que aceleró muy fuerte y se dio a la fuga”.
“No me quedaban más elementos que disparar. Fue la decisión que tomé. Quise inhabilitar una rueda. Se le dio la voz de alto y no hizo caso. Ahora sé que el proyectil mío lo tiene una de las víctimas, creo que es Domínguez”, agregó luego de presenciar del choque del auto de los jóvenes.
Ibáñez dio su visión acerca de la Masacre de Monte: “Escuché a un ayudante de guardia que pidió un móvil. Fuimos con Monreal de acompañante y la oficial Bianco en la parte de atrás. Iba manejando en dirección para la Costanera y, cuando me pidieron apoyo, vi que venía el Fiat. Puse el móvil mirando para Ruta 3 ehice un cerrojo policial que me enseñaron en la escuela de Policía para cortar la vía de escape”.
Así como su compañero, también coincidió en este punto: “Los cruzamos y se dieron a la fuga con el auto. Cuando venían hacia mí, frené y vi que estaban a 50 metros. Se bajó Monreal, los quiso detener y vi que nos querían chocar. Atiné a atajarme, pensé que me iba a chocar a mí”.
“Mi trabajo fue hacer un cerrojo y nada más. No vi a Monreal disparar. Escuché cuatro explosiones, en ese momento tenía mucho cagazo. Vi que levantó la mano, pero no si había sacado el arma”, finalizó.