Mateo tiene nueve meses y sufre de fotofobia, o intolerancia a la luz. Para hacer frente a ese síndrome, utiliza unos anteojos recetados, los cuales se extraviaron el pasado 13 de febrero en el trayecto de barrio Padre Kolbe hacia la zona de calles Pirán y Gutiérrez, en Paraná.
Marta, su tía, aseguró que el no puede salir de la casa sino tiene esos anteojos, que son costosísimos. «No sabemos si a los papás se les cayeron cuando bajaron del auto, o qué paso.. Por favor rogamos que si alguien los encontró que se comunique», pidió la mujer.
Los anteojos recetados tienen un marco en color azul, y los cristales son en tonos marrón y naranja. «Son enteros, como antiparras que se ponen por arriba de la cabeza, es decir que no tienen patitas porque son de bebé», explicó.
Quién los encuentre puede contactarse al 0343-154 168 295