Al pronunciar el discurso de cierre del Foro Económico Internacional de las Américas, el presidente Javier Milei afirmó que “era fundamental evitar la hiperinflación” y advirtió que “Argentina ha vivido por más de 20 años bajo un régimen populista salvaje que ha llevado a la destrucción del capital y de la productividad, motivo por el cual estamos en una situación absolutamente miserable”.
De igual manera, subrayó que “nuestro objetivo era alcanzar el déficit cero en el año 2024 y la verdad que estábamos perfectamente y absolutamente convencidos de llevar adelante un ajuste fiscal, el cual obviamente tiene mucho de motosierra y licuadora. Si lo queríamos hacer rápido había que usar las dos cosas”.
El jefe de Estado sostuvo que “cuando uno se encuentra con una macro profundamente desequilibrada, crecer se hace muy difícil, en especial cuando durante muchísimos años se han distorsionado los precios relativos”.
Milei hizo hincapié en que el ” populismo no es gratis: los salarios en dólares promedio en la década del 90 eran 1800 dólares y si ustedes ajustaran por la inflación americana, eso implicaría que los salarios argentinos en promedio deberían ser de 3 mil dólares, algo así como 3 millones de pesos”.
No obstante, aclaró que en la actualidad “con suerte, y exagerando, podemos decir que son de 600 dólares, lo cual es falso porque son menores. Lo que significa que los argentinos hemos perdido el 80 por ciento de nuestro ingresos, esa es la verdadera catástrofe”.
Dijo que, en consecuencia, “tenemos más del 50 por ciento de pobreza y 10 por ciento de indigentes, un poco más también”, al tiempo que mencionó: “El país que produce alimentos para 400 millones de seres humanos y tiene una presión fiscal sobre el sector productor de alimentos del 70 por ciento”.
Explicó que “es decir que el Estado se queda con el alimento de 280 millones de seres humanos y tiene 5 millones de argentinos que no les alcanza para comer.” El primer mandatario subrayó que se trata de un una “catástrofe” en materia de crecimiento, bienestar, empleo y salarios. “La herencia que recibimos era muy complicada”, expresó.
En tal aspecto, precisó cuáles fueron las razones para impulsar medidas de ajuste durante los primeros 100 días de gobierno. “No es para llorarla, siempre hubo algo que nos quedó claro con “el jefe” (en referencia a su hermana y secretaria de la Presidencia, Karina Milei): si verdaderamente llegábamos a ganar, es porque se estaba en una situación desastrosa.”.
Agregó que “para que la gente despertara de la manera que lo está haciendo, evidentemente tenía que ser una situación complicada. Nosotros siempre estuvimos preparados para recibir esta papa caliente y eso lo pueden ver, si no hubiéramos tomado medidas rápidas ya habríamos volado por los aires varias veces”.
Acto seguido, detalló que “si repasan la literatura de indicadores tempranos de crisis, cuando ustedes tienen déficit gemelos por 4 puntos del PBI, es una alerta amarilla; si tienen 8 puntos del PBI, no solo que es alerta roja, sino que se van a pegar una piña importante. Nosotros recibimos de herencia déficits gemelos por 17 puntos del PBI”.
De esa manera, aseveró que “básicamente la herencia tenía lo peor de las tres peores crisis de Argentina: un desequilibrio monetario que era peor que el que teníamos en la previa del Rodrigazo en el año 75; un desequilibrio del balance del Banco Central que era peor que el que tuvo Alfonsín a inicios del año 89, que terminó en la hiperinflación; y los indicadores sociales peores que el año 2001, es decir, la previa de la crisis del 2002”.
Tras remarcar que se trataba de “la suma de todos los males literalmente”, Milei señaló que “ese déficit gemelo de 17 puntos del PBI se componía básicamente de 15 puntos del déficit fiscal consolidado, donde eran 5 correspondían al tesoro y 10 al Banco Central”.
Indicó que “si bien durante todo el gobierno anterior se utilizó la emisión monetaria para financiar el desequilibrio fiscal, por 28 puntos del PBI, 13 de estos tuvieron lugar el último año. Tema no menor si ustedes se ponen a pensar porque la base monetaria hoy es de 2,6 del PBI”.
En tal aspecto, el jefe de Estado enfatizó que “dejaron cargado una quintuplicación de los precios”. Además, comentó que “si miran el balance del Banco Central, tener posiciones en Leliqs que iban entre 30, 60 y 90 días, toda pasada a pases, estaba toda esa posibilidad de multiplicar por cuatro la cantidad de dinero en un día”.
En ese marco, sostuvo que “durante la primera semana del mes de diciembre los precios corrían al 1 por ciento diarios, lo cual significa que en término anuales es 3700 por ciento anual de inflación. Si separaban las dos primeras semanas, eso daba 7500 por ciento anualizado y si lo que fue la inflación mayorista del mes de diciembre fue de 54 por ciento, eso anualizado es 17 mil por ciento”.
Javier Milei alertó que “estábamos frente a una hiperinflación, la economía había entrado en un camino recesivo en el segundo y tercer trimestre del año pasado, pero se fogoneó con muchísimas emisiones monetarias para tratar de forzar un resultado electoral que no se les dio”.
Explicó que con el propósito de evitar esta crisis económica, “era necesario generar un programa de estabilización bien duro, que nosotros lo teníamos y que recién lo pudimos anunciar el tercer día por la cuestión de los nombramientos en el Banco Central”.
Sobre este último punto, expresó que este programa estaba integrado de tres elementos fundamentales: “Un ajuste fiscal, una corrección cambiaria y la definición de una nueva política monetaria. Lo fundamental era terminar con la emisión monetaria para que no hubiera convalidación monetaria de la suba de precios y que eso no terminara escalando y generando la hiperinflación”.
Declaró que “junto a la devaluación que se sinceró, porque lo único que hicimos fue llevar el tipo de cambio al de mercado, ajustado por impuesto país, decidimos ir a la política de déficit cero en serio, no mentiroso”.
El mandatario señaló que “si nosotros alcanzáramos el déficit cero en la línea financiera, significa que la deuda no crece más. La relación de deuda producto es no creciente”.
En tal sentido, indicó que “por ende uno se convierte en solvente intertemporalmente y la consecuencia de ello es que empieza a caer el riesgo país y bajar la tasa de interés y esta última recobra su función esencial que es la de ser un mecanismo de coordinación intertemporal y que el proceso de crecimiento guarde relación justamente con la tasa natural de interés”. Asimismo, Milei precisó que “iniciamos un proceso de saneamiento del balance del Banco Central”,
Celebró la eliminación de “la obra pública de cuajo, algo de lo cual estoy profundamente orgullosa, siendo que es una gran fuente de corrupción y robo a lo cual creo que toda la gente de bien debería oponerse”.
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“Por otro lado, eliminamos también de cuajo las transferencias discrecionales a las provincias y echamos 50 mil empleados públicos”. De igual manera, puntualizó que “ahora van a caer 70 mil contratos”, como así también que se eliminaron “200 mil programas sociales entregados de manera irregular”.
Aclaró, no obstante, que “en ningún momento descuidamos la política social porque en el medio duplicamos la AUH, duplicamos la Tarjeta Alimentar y multiplicamos por tres la asistencia en el plan Mil Días para las mujeres embarazadas”.