La ya disuelta banda Nirvana recibió una demanda por el uso de imágenes que contenían pornografía infantil. El reclamo se basa en la portada del disco Nevermind, de 1991, en el que aparece la imagen de un bebé desnudo nadando detrás de un billete.
Spencer Elden, el niño que aparece en la imagen, fue quien presentó la demanda este martes a ex integrantes y herederos del grupo. En el momento de hacerse la fotografía, el joven modelo tenía apenas cuatro meses de vida.
La denuncia presentada en California indica que los acusados promocionaron pornografía infantil de Spencer de forma intencional y comercial, además los señala por hacer uso de “la impactante naturaleza de su imagen” para promocionarse a sí mismos y su música.
Esto último es lo que parece motivar el reclamo, ya que el texto continúa acusándolos de seguir beneficiándose de la comercialización de la imagen. Entre los denunciados se encuentran los integrantes de la histórica banda de grunge: Dave Grohl, Krist Novoselic y Kurt Cobain (ya fallecido).
Esta demanda también apunta al fotógrafo de la portada, Kirk Weddle y a Courtney Love, heredera del patrimonio de Cobain. El dato curioso es que se incluye también a Chad Channing, que fue baterista de Nirvana hasta 1990, un año antes de que se editara Nevermind.
El demandante reclama una indemnización por los daños sufridos y que continuará sufriendo de por vida.
La historia del emblema de Nirvana, señalado como pornografía infantil
Spencer Elden realizó años atrás un trabajo como modelo en el que replicó la tapa del disco Nevermind con motivo de los 25 años de su lanzamiento.
En aquel entonces, dijo: “Mis padres sabían quiénes eran Nirvana, pero no estaban muy interesados en la escena grunge. Mi padre Rick asistía en ese momento a la escuela de arte y sus amigos le pedían a menudo ayuda para sus proyectos”.
Y continuó: “Su amigo Kirk lo llamó y le dijo: ‘¿Querés ganar algo de dinero hoy y tirar a tu hijo a la pileta?’ Mis padres me llevaron allí, al parecer me soplaron en la cara para estimular mi reflejo de inmersión, me sumergieron, me hicieron algunas fotos y me sacaron. Eso fue todo. Les pagaron 200 dólares y se fueron a comer tacos”, contó.