Ante la constante bajante del río, la Subsecretaría de Saneamiento de la Municipalidad de Paraná interviene nuevamente en la Toma Nueva para garantizar el servicio de agua potable en Paraná. Se trabaja en el mantenimiento de las bombas succionadoras del líquido ya que en el canal de toma se encuentra mucha sedimentación que puede dañar los equipos.
Este problema, registrado en la jornada del martes hizo parar la producción de agua en la Planta del Cristo, lo que ocasionó baja presión del suministro en zonas centro, San Agustín y Kilómetro 5 ½.
Durante la jornada de este miércoles, buzos tácticos de la Policía de Entre Ríos constataron sedimentación en el canasto protector de la bomba ubicada en el muelle más antiguo, por eso se procedió a la detención de la misma para evitar el daño total. Asimismo, se seguirá canalizando el conducto que se abrió hace 15 días, donde se removieron 500 m3.
«No hay sectores sin agua potable», aclaró el director del Centro de Integraciones de los Servicios Públicos de la Municipalidad de Paraná, Roberto Sabbioni. Y en ese sentido, explicó: «Lo que hay es baja presión porque anoche paramos la bomba debido a que se trabaja en su mantenimiento.