“Cambiar siempre es un proceso. El tema son las circunstancias que rodean esa decisión. A veces, ocurren imponderables que nos colocan en una situación de obligación de cambiar. Esos cambios están condicionados por el miedo, con una enfermedad, por ejemplo. El tema es que, cuando el miedo pasa, y la enfermedad se cura, aparecen de nuevo los malos hábitos.
Otras veces hay una decisión de cambio consciente, con una planificación. Ese cambio, que permite madurar, es el más recomendable”. La definición pertenece al contador Carlos Sosa, onsultor de empresas, coach ontológico y especialista en neuroliderazgo.
Sosa reconoció que “Cuando uno está bien, es más difícil proponerse un cambio. Ahí, el secreto está en revisar en qué áreas puedo mejorar. Los médicos dicen que no hay peor paciente que el que siente bien, porque no quiere seguir evolucionando o transgrede límites y vuelve a hábitos que no son tan buenos”, reveló.
Secreto. De visita en Nunca es tarde, el especialista compartió uno de los tips que aplica en su experiencia profesional. “Para cambiar hay que ir de lo simple a lo complejo. La inteligencia práctica nos permite determinar qué cambio puedo hacer con bajas chances de fracasar. Muchas veces, lo ideal es mejorar un punto fuerte o una habilidad determinada”. Y en ese mismo sentido apuntó el riesgo de no encontrar los resultados buscados. “La frustración está dentro de la familia del enojo. Y a veces, el enojo es la cara visible de la tristeza. O del miedo”.
Carlos Sosa es uno de los organizadores y disertantes de Funcionalmente IV; el Congreso sobre Liderazgo, Neurociencias y Coaching, que se llevará a cabo en el Centro Provincial de Convenciones de Paraná, el viernes 15 de Noviembre bajo la temática del Congreso será «Aprender a cambiar para Influenciar”.
Del encuentro participarán varios disertantes de nivel regional y nacional, entre los que se destaca el doctor Bernardo Stamateas. Para mayor información y acceso, se puede consultar en sosayasociados.com.
Aquí, la entrevista completa: