Durante la noche del jueves, una joven de 22 años se encontraba junto a su hermana comprando unas cosas en un kiosco ubicado en Avenida Laurencena.
Según relató a la Policía, “en un momento apareció sorpresivamente su ex, quien hasta hace unos días tenía restricciones por episodios de violencia de género”.
Luego de hablar con ella, su expareja le sacó el celular y salió corriendo. La damnificada lo persiguió hasta el domicilio del mismo, ubicado en calle Ambrosetti y Scalabrini.
Hasta allí llegó personal de Comisaria Octava y dialogaron con la víctima. Mientras sucedía esto, salió el acusado de 25 años, “amenazando en forma agresiva y violenta”, por lo que fue detenido, informaron desde la Policía.
Luego, “un familiar del sujeto autorizó el ingreso de los funcionarios a la casa, ya que el individuo negaba haberle sacado el teléfono. Tras una búsqueda lograron hallarlo arriba del techo”.
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Finalmente, el fiscal dispuso “el secuestro del teléfono celular y su devolución a la damnificada, y el traslado de su expareja a la Alcaidía de Tribunales por el supuesto delito de robo en flagrancia en contexto de violencia de género”.