No es la primera vez que Roberto Giordano está en el centro de la atención por cuestiones legales. En 2014, el reconocido peluquero acordó con la Justicia una pena de dos años y medio de prisión en suspenso en una causa por evasión de los aportes previsionales de sus empleados. Sin embargo, el mediático podría llegar a ser condenado a seis años de prisión por un nuevo delito económico del que se le acusa.
Según informaron en “El diario de Mariana”, el ex compañero de Teté Coustarot en la conducción de desfiles de moda fue procesado y será llevado a juicio oral por “insolvencia fraudulenta”. Y es que Giordano habría creado diversas “sociedades” para no cumplir con los juicios laborales que se iniciaron en su contra.
Ante las acusaciones recibidas, Roberto se defendió: “Las presuntas evasiones fueron llevadas a cabo por sociedades de las cuales yo no tengo ninguna participación societaria”. Asimismo, el peluquero explicó: “Debido a la inmensa cantidad de juicios laborales que tuve que afrontar y pagar, sumado a los bajos ingresos de la peluquería, decidí dejar de explotar los diversos salones«.
“Ofrecí mis servicios como asesor de marketing, profesor de peinado y cortes de cabellos a diferentes empresas”, agregó el mediático respecto a las distintas actividades que debió realizar para pagar sus deudas.
Sin embargo, las declaraciones del creador de la frase «Qué noche Teté» no coinciden con el testimonio de un ex empleado de su salón de belleza. “Una vez pasó que, en el 2008 o 2009, cuando trabajaba para Big Brands S. A., Giordano vino a una reunión en el Paseo Alcorta y despidió, en el mismo momento, a cinco personas juntas porque se rumoreaba que estaban armando una empresa. Solamente dijo que no pertenecía más a su empresa y los despidió”, aseguró el trabajador.
Y concluyó muy seguro: “Todo ello nos llevaba a pensar que el que estaba a la cabeza era Giordano, que él era el dueño. Giordano dirigía todo, había contadores y demás, pero el que dirigía todo era él”.
“Acá es cuando el juez dice: ‘un profesor de peinado, un hombre que enseña a cortar el cabello o que es asesor de marketing no se sienta a negociar con directivos de un canal, no tiene documentos de la creación de las empresas y no llega y echa a cinco personas, de la noche a la mañana’. Esto es lo que más termina complicando a Roberto Giordano”, destacó uno de los panelistas de “DDM”, programa conducido por Mariana Fabbiani en América TV.
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Ante las incongruencias entre ambos relatos es que el juez en lo Penal Económico Marcelo Aguinsky decidió llevar a juicio oral a Roberto. En caso de que el peluquero sea declarado culpable, y ante a su anterior paso por la Justicia, el mediático que vive en Punta del Este (Uruguay) podría llegar a ser condenado a entre dos a seis años de prisión y se podría convertir en la primera persona en ir a la cárcel por evadir impuestos.