Entre el sábado 24 y este viernes 30 fueron nueve las ballenas que encontraron sin vida en la costa argentina, por lo que existe un incremento en su mortandad. Existe una hipótesis entre quienes trabajan en el lugar, que apuntan a la ingesta de una toxina denominada “Marea Roja”. Esta se produce cuando hay un crecimiento desproporcionado de algas.
El registro de fallecimiento de ballenas fue realizado por la sección de Flora y Fauna Silvestre de Chubut. Todos los hallazgos se produjeron en las costas de Puerto Pirámides. En las últimas horas fueron dos los ejemplares hallados sin vida y ante esta situación alertaron a la población.
La atención ante esta situación fue puesta luego de la aparición de una ballena franca austral muerta en cercanías de Punta Pardelas. El equipo de investigadores perteneciente a “Siguiendo Ballenas” se percató de su situación. Las embarcaciones Gudeñak y Maruca remolcaron al animal hasta Punta Alt. En ese sitio le realizaron la necropsia y así dieron con el motivo de su muerte.
Sin embargo, fue el primero de varios ejemplares. La mortandad de ballenas en la costa argentina se multiplicó y este viernes se encontraron dos nuevos ejemplares muertos en El Pedral y cerro Avanzado. Con estos dos llegaron a nueve ballenas fallecidas.
El titular de Flora y Fauna Silvestre de Chubut, Fernando Bersano, señaló que todavía no pueden determinar si los ejemplares murieron por la misma causa. Esto se debe a que están avanzando con los análisis correspondientes.
Hipótesis
El equipo del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) está intentando encontrar el origen de las muertes. Las necropsias son realizadas por un grupo encabezado por el Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral.
Cuentan con la colaboración de la Universidad Nacional de la Patagonia “San Juan Bosco”, el Cenpat y el Laboratorio Provincial de Salud Ambiental.
En ese sentido apuntan a una posible “Marea roja”. Esto significa que hay una proliferación de microalgas en algún cuerpo de agua que tiene un efecto nocivo para sus depredadores. Esta proliferación otorga un color rojizo al mar, por lo que de ahí viene su nombre.
Las muestras tomadas de otros animales del lugar y analizadas en las últimas horas detectaron un alto nivel de esa toxina. Está contraindicada incluso para el consumo humano, ya que puede derivar en una intoxicación fatal.
Ante esta situación alertaron a vecinos de la localidad de Puerto Pirámides, en Chubut, que no utilicen el agua de la red domiciliaria para beber o cocinar. Esto se debe a que se trata de agua de mar desalinizada.
Foto: ADN Sur.