La animadora y actriz Susana Giménez atraviesa su quinta jornada de internación en el Sanatorio Cantegril de la ciudad uruguaya de Punta del Este por complicaciones derivadas del coronavirus “sin fiebre, de buen ánimo y molesta con la tos”.
El breve parte médico suministrado a Télam desde el equipo de trabajo de Giménez especificó que la popular artista “aún no satura del todo bien, por eso sigue ayudada por oxígeno”.
La conductora argentina, de 77 años, que ya se aplicó las dos dosis de la vacuna Pfizer en el Campus de Maldonado, contrajo coronavirus en Uruguay, país donde reside desde mayo de 2020, y había presentado síntomas desde el fin de semana anterior.
El Covid-19 alcanzó al entorno familiar de Susana, ya que su hija Mercedes Sarrabayrouse también fue hisopada y dio positivo.
Esta evolución en su cuadro aleja por el momento las versiones mediáticas que señalaban que la animadora podía ser externada en las próximas horas y continuar el tratamiento en su chacra «La Mary», de San Ignacio.
Vacunada
La animadora, que ya se aplicó las dos dosis de la vacuna Pfizer en el Campus de Maldonado, contrajo coronavirus en Uruguay, país donde reside desde mayo de 2020, y había presentado síntomas desde el fin de semana último.
Luego de desarrollar una «leve insuficiencia respiratoria» -de acuerdo con el relato que hizo el sábado una de las profesionales tratantes a los medios de comunicación reunidos frente al centro médico- Giménez fue ingresada el jueves por la noche.
Si bien nunca estuvo en el área de cuidados intensivos, por protocolo fue aislada en un área VIP del Cantegril y tratada con medicamentos y oxígeno.