El cabo Michael Natahel Verón, de 26 años, está luchando por su vida al sufrir graves lesiones en su columna vertebral. En una “fiesta de recepción” en el Ejército lo arrojaron a una pileta. Fueron sus compañeros del Regimiento de Infantería Monte 30, de Apóstoles, en Misiones. El joven se golpeó en la caída.
El suboficial se encuentra en grave estado y será sometido en las próximas horas a una operación. Está internado en una clínica privada de Posadas y se evalúa un eventual traslado en un avión sanitario a Buenos Aires.
Tras una primera internación en el hospital Madariaga el suboficial Verón habría sufrido el desplazamiento de una o varias vértebras, lo que compromete seriamente su recuperación.
El coronel Sergio Jurczyszyn, comandante de la Brigada de Monte 12, reveló que los médicos consideraban altamente riesgoso un traslado a Buenos Aires.
Jurczyszyn señaló que un equipo de intervención tomó declaración a los testigos del hecho. En ese sentido expresó que “son simplemente relatos pormenorizados, pero tienen bastantes certezas como para que me permitan comenzar con una instrucción por falta disciplinaria gravísima. Hay una presunción de delito de abuso de autoridad. Me voy a presentar ante la justicia federal para hacer la denuncia”, anticipó el militar.
La familia del suboficial aguardaba novedades en la puerta de la clínica en la que se encuentra internado.