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Paraná

Un guía de pesca llevaba 700 kilos de carpinchos faenados en lancha

El cazador fue advertido por Prefectura. La carne es muy consumida.

Un guía de pesca llevaba 700 kilos de carpinchos faenados en una lancha. Prefectura Naval Argentina multó a un cazador furtivo e incautaron un cargamento de 700 kilos de carpinchos faenados. Fue en un operativo realizdo por personal que patrullaba el río Paraná que detectó a un hombre a la altura del kilómetro 1444, en la zona de “Tres Islas”, en una embarcación cargada con 18 bolsas de arpillera.

Al identificar al tripulante, se comprobó que llevaba animales faenados infraccionando la Ley de Caza y conservación de la Fauna Silvestre provincial.

Como resultado del operativo, e indicaciones del Juzgado de Instrucción y Correccional de Ituzaingó, Corrientes, a cargo del Dr. Eugenio Balbastro, el involucrado fue multado y se secuestró su embarcación y la carga que transportaba.

Carne muy consumida

El especialista en animales silvestres, Amado Martínez, se refirió a la situación de los carpinchos en Misiones y en Corrientes. Al respecto, aseguró que la carne de estos animales es muy consumida y que viven al acecho de los cazadores.

En este sentido, el especialista explico que, si bien la caza de los carpinchos está prohibida, “hay gente que ofrece carne de Carpincho, hay complicidad y poco control”.

No obstante, alegó que la carne de este animal puede provenir de Corrientes, ya que allí, sobre todo en Ituzaingó, la caza con chusas y perros esta liberada.

Por este motivo, aseguró que “es difícil proteger la fauna y que la gente no coma la carne”.

Sin embargo, aclaró que esta especie no está en peligro de extinción y que en varias zonas se registra sobrepoblación.

Aun así, recordó que en varias ocasiones estos animales mueren en cantidad, debido a diferentes enfermedades como el mal de cadera y a la falta de pasto.

Pueden hacer daño

El especialista se refirió a la aparición de los carpinchos en el Nordelta, en Buenos Aires. En este sentido, dijo que “estos animales no tienen miedo a la gente. Algunos se acercan incluso a los kayaks, pero, los que tienen crías suelen atacar. Tienen dientes poderosos, pueden hacer daño”.

 Por último, sostuvo que “es necesario dejar el manejo de estos animales en manos de profesionales, que saben que hay que hacer”.

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