En Formosa hay conmoción debido a que una beba murió de un golpe en la cabeza, caso por el que detuvieron a su abuela. El hecho se produjo en la tarde del domingo 1 de enero y la justicia se encuentra investigando el caso. La detención de la mujer se debe a que la beba de un año y tres meses estaba a su cargo, al igual que otros ocho de sus nietos.
El juez a cargo de los juzgados penales de primera y tercera circunscripción judicial formoseña, José Luis Molina, brindó detalles sobre el hecho. Fue él quien especificó a Télam que todo sucedió aproximadamente a las 18, en un domicilio del barrio Divino Niño en la capital formoseña.
El caso
Según indicó el magistrado, tomaron conocimiento sobre el hecho luego del ingreso de la menor en el Centro de Salud del Barrio Lote Rural 111. La niña de un año y tres meses ingresó sin signos vitales y con lesiones en el cuerpo. Llegó al lugar por el traslado de su abuela, una mujer de 60 años.
La abuela de la beba que murió por un golpe en la cabeza estaba a cargo de nueve niños -uno de ellos es la beba fallecida-. Eran su responsabilidad desde ese domingo a las dos de la madrugada, cuando se llevó a cabo una reunión familiar con motivo de Año Nuevo. Los padres de los niños visitaron la vivienda de otros familiares en barrio Villa del Carmen, lo que motivó que los menores queden a cargo de la mujer.
Investigación
Tras las averiguaciones, se presume que los menores estaban solos con su abuela y no estaban presentes los padres biológicos. Dos de ellos presentaban lesiones: además de la beba, un hermanito suyo de dos años también fue trasladado al Hospital de la Madre y el Niño.
La abuela quedó detenida por decisión de la justicia y, a su vez, se produjo el traslado del cuerpo de la beba hasta la morgue. Allí se le practicó una autopsia que determinó que su muerte se produjo por un traumatismo encefalocraneano grave. Esto determinó que la mujer detenida quede alojada en celdas de la alcaidía de Mujeres.
El juez explicó que la causa está en etapa de investigación y toda información se deriva a la Magistratura. Advirtió que no se descarta ninguna hipótesis, pero que podría tratarse de un homicidio agravado y lesiones agravadas (tres hechos) en concurso real.
Para la obtención de más pruebas, la Policía Científica fotografió el inmueble en el que ocurrió el hecho y secuestró una funda de almohada con manchas de sangre y restos de pelos. También se llevaron un almohadón con cabellos.
Los menores a los que derivaron al Hospital La Madre y el Niño presentan lesiones de carácter leve y permanecen internados bajo el cuidado de una tía.
