En las últimas horas se supo que por determinación del juez federal de Rawson, doctor Gustavo Lleral, sobreseyeron a los gendarmes relacionados con el caso Santiago Maldonado. Se trata del gendarme Emmanuel Echazú y los agentes Juan Escola, Víctor Vaquila Ocampo y Marcelo Ferreyra. Todos ellos fueron investigados por la desaparición y posterior muerte del artesano.
La decisión llegó este viernes y se relaciona con el caso que inició en agosto de 2017, luego de descubierta la muerte del joven artesano. Su fallecimiento se produjo en Chubut, mientras participaba de un corte sobre la Ruta N° 40 organizado por la comunidad mapuche de Cushamen. La gendarmería intentó desalojar a los manifestantes y fue ahí que Maldonado habría caído al río en el que posteriormente lo encontraron sin vida.
En una resolución de 361 páginas, el juez señaló: “Puedo afirmar con absoluta certeza que ninguno de los sucesos y ninguna de las acciones humanas analizados son susceptibles de ser considerados delitos, de los tipificados por nuestra ley penal”. De esa manera argumento la decisión e sobreseer a los imputados.
Al gendarme Echazú lo responsabilizaron de la supuesta desaparición forzada de Maldonado; mientras que a los agentes Escola, Vaquila Ocampo y Ferreyra los señalaron por los delitos de daño, abuso de autoridad y omisión de los deberes de funcionario público.
“Ni siquiera se les puede dirigir el reproche de un hipotético abandono de persona en perjuicio de Santiago Andrés Maldonado pues, tal como se dijo, no existe elemento de prueba alguno que permita sostener ese juicio de tipicidad y esa atribución penal”, manifestó el juez Lleral sobre el accionar de los gendarmes.
Desaparición
Maldonado desapareció el 1 de agosto de 2017, durante un operativo de Gendarmería que intentó desalojar la protesta de la comunidad mapuche de la Pu Lof Cushamen sobre la Ruta N° 40, en Chubut. Los mapuches se encontraban reclamando tierras ancestrales ubicadas entre la Ruta N° 40 y el río Chubut.
El cuerpo del joven artesano apareció 78 días después, unos 400 metros río arriba de donde lo habían visto por última vez. Las pericias realizadas a su cuerpo señalaron que permaneció en el mismo lugar prácticamente desde el momento de su desaparición.
Ahora, seis años después, sobreseyeron a los gendarmes vinculados con la supuesta desaparición de Santiago Maldonado.