En Santa Rosa, La Pampa, sigue la conmoción por el crimen de Lucio Dupuy. Lucio era un niño de cinco años que murió por los golpes que recibió presuntamente de la pareja de su madre, Abigail Páez (27 años). Se desconoce si la mamá del menor, Magalí Espósito (24) tuvo que ver con el desenlace. De la experiencia de encontrarse con la escena habló una de las vecinas de la localidad.
Haydée (así se llama la testigo), dijo en declaraciones periodísticas que nunca pensó encontrarse en frente de una “asesina”. Fue en el contexto de su relato de la situación con la que se encontró en el domicilio de calle Allan Kardec al 2.385.
La mujer dijo haber visto en el lugar a su vecina con el niño en brazos y pidiendo ayuda. Cuando le preguntó qué había ocurrido, quien se presume que era Páez, contestó: “Salí cinco minutos y cuando volví la casa estaba revuelta y el bebé estaba tirado en el patio”.
“Me agarró del brazo y me dijo que la ayudara porque se le moría el hermano”, sostuvo la mujer que agregó que los policías que estaban allí se negaron a trasladar a la víctima. “Que no mienta la policía que estaba acá” señaló y agregó que los efectivos no le practicaron la maniobra de respiración boca a boca.
En diálogo con C5N, recordó que en ese momento estaba cocinando para sus dos nietas, pero detuvo su accionar al escuchar gritos desde afuera. Fue en ese momento que vio a Páez y se le acercó. Sobre ese primer contacto dijo: “Lo vi que estaba pálido. Le toqué las manitos y vi que estaba helado”.
En su relato, la vecina dijo que tanto ella como un vecino le realizaron labores de reanimación al nene, pero no pudieron cambiar nada. Recién con la colaboración de una ex enfermera consiguieron que recuperara la respiración.
Sin embargo, una vez que llegó al Hospital Evita quedó consumado el hecho. Lucio Dupuy murió con apenas cinco años en lo que parece ser un crimen que deberá resolverse.