Este miércoles, los habitantes de Paraná y varias ciudades de la región central del país experimentaron temperaturas atípicas para la época: 32 grados de máxima y hasta 33 de sensación térmica. Este fenómeno no durará mucho, según anticipó Ignacio López Amorín, del Servicio Meteorológico Nacional.
El especialista advirtió que un frente de aire muy frío avanza por la Patagonia y se estima que llegará a la región central en la mañana del jueves, en forma de fuertes vientos. El cambio en la rotación del aire provocará que la temperatura baje varios grados y se produzcan lluvias y tormentas aisladas de menor envergadura, “teniendo en cuenta que la humedad es baja y no están dadas las condiciones necesarias para fenómenos de gran intensidad”, advirtió.
Octubre. López Amorín remarcó también que la nubosidad y la inestabilidad se mantendrán el viernes, con temperaturas que oscilarán entre los 11 y los 19 grados. Sin embargo, el fenómeno más marcado tendrá lugar el sábado cuando la temperatura mínima sea inferior a los 5 grados. “Esperamos para la zona de Paraná, registros de 3 grados para la mañana temprano, una situación que podría repetirse el domingo”.
El meteorólogo anticipó asimismo que no se avizoran lluvias de consideración para los próximos días y que el termómetro no volverá a aumentar por encima de los 25 grados, antes de que termine la primera quincena del mes de octubre.