Una vecina de barrio Thompson de Paraná fue víctima de un violento asalto a plena luz del día. Un sujeto, que se trasladaba en una moto de baja cilindrada, la golpeó brutalmente para sustraerle su celular y se dio a la fuga.
“Fue difícil e inesperado, pese a que ya hemos sufrido otros robos en la zona. Eran las 15.30 cuando estaba sentada tomando sol, tranquila y trabajando por celular, ya que hechos violentos en este último tiempo, no habían pasado”, relató María, la víctima del robo. Luego continuó: “Mi nena justo había salido con una vecina a hacer un mandado. Cuando ellas llegaron a la esquina, este señor pasó en la moto por calle Pablo Lorentz y volvió despacito. Confiada, lo atendí de forma cordial pensando que necesitaba algo de la feria y le pregunté qué necesitaba. En ese momento me pidió el celular, quedé anonadada no creía lo que estaba escuchando”.
María se negó a darle su teléfono y el ladrón reaccionó violentamente. “Me agarró del brazo, me arrancó la lima de uñas que tenía y ahí conté tres piñas. Me fui cayendo al suelo, vi blanco y no sé si me siguió pegando”, recordó.
La mujer aseguró que, tras la golpiza, “sentía que se me salía el ojo”. “Una vecina que me asistió, con la cara que puso, ya me dijo todo”. “Tenía el ojo en la ceja y no lo podía abrir”, aseguró
Ante los gritos desesperados de María, los vecinos acudieron en auxilio y otros de sus hijos corrió al delincuente que huía a bordo de la motocicleta. “Mi hijo lo alcanzó, lo arrastró unos metros y alcanzó a sacarle el casco, pero se escapó. Hasta el momento no sabemos quién sería esta persona”, indicó al confirmar que el joven “también tiene sus machucones por defender” a su madre.