La fuerte disparada del dólar blue -que superó los $1000- ya empieza a dejar sus primeros efectos sobre la economía. Por la crisis cambiaria, los analistas ya prevén un traslado a precios y se percibieron suspensiones en entregas y falta de productos en distintos comercios, incluidas las góndolas.
En primer lugar, la Terminal de Cargas Argentina (TCA) le informó al Centro de Despachantes de Aduana (CDA) que las operaciones de exportación e importación se encuentran suspendidas desde ayer [martes] y por 72 horas. Según fuentes oficiales, la medida se tomó “en cumplimiento de diligencias administrativas aduaneras dispuestas por la AFIP”.
Según lo que publicó TN, los empresarios afectados por la situación, manifestaron que se bloqueó es el sistema Malvina que usa la Aduana para la TCA, que es la única terminal aérea del país. Por lo tanto, no se puede documentar ninguna importación ni exportación que pase por el aeropuerto de Ezeiza.
“Estamos en temporada alta de exportación de arándano y fruta fina, por ejemplo, que se vende afuera y se envía por avión porque se consume en pocos días. Por el lado de las importaciones, quedan varados insumos médicos, reactivos de diagnóstico”, explicaron ante la consulta de este medio, que sostuvieron que “nunca pasó algo así en los últimos 20 años”.
“Siempre aparecen algunas demoras, inconvenientes informáticos, pero un cierre generalizado de una terminal no había sucedido hasta ahora”, definieron.
Además, explicaron la existencia de irregularidades: “La Aduana intimó a la Terminal de Cargas porque no estaban adecuando los sistemas en función de lo pedido”.
En rigor, en una resolución de la AFIP se informa que se deberá “proceder al inmediato bloqueo informático del punto operativo por espacio de 72 horas”. en tanto, ordena “intimar a la Terminal de Cargas Argentina a que, en idéntico término al establecido en el Artículo 1°, informe la situación de la mercadería”.
El impacto en el abastecimiento y el traslado a precios
El precio del dólar blue sirve como referencia para muchas actividades económicas y un salto brusco trae consecuencias inmediatas. En primera instancia aparecen las remarcaciones de precios por la expectativa de que la suba del dólar encarezca los costos.
En tanto, también se percibieron problemas de faltantes de productos en algunos comercios, mientras que otros espacios alertaron sobre paralizaciones en las ventas y frenos en los envíos de listas.
En términos macroeconómicos, además, especialistas ya advierten que habrá un traslado inevitable a precios. A modo de ejemplo, economistas de la consultora LCG pronosticaron “que la inflación no bajará del 10% mensual hasta fin de año”.
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