En las últimas horas trascendió que una mujer policía de Salta denunció a su jefe por acoso y la trasladaron de su lugar de trabajo. La denuncia fue presentada por una suboficial principal, que acusó a su jefe de acoso y hostigamiento laboral. El tratamiento del caso está en manos del Juzgado de Violencia Familiar y de Género N° 2 desde mayo de 2023.
La agente pertenece al Departamento de Seguridad Urbana (DSU) salteño. En declaraciones periodísticas, la mujer reveló que la llegada del nuevo jefe a su lugar de trabajo se produjo a fines de diciembre de 2022.
“Desde un primer momento se notaba su conducta inapropiada”, declaró C.R., la presunta víctima, al medio Cuarto Poder. Luego añadió: “Yo iba al gimnasio del DSU y dejé de ir porque me sentía incómoda. Después me hizo poner en la guardia fija, cuando yo soy uniformada, y por ende, de calle. En la guardia están únicamente los civiles”.
La situación nunca fue a menos. Incluso reveló que el jefe le dijo a una compañera suya que la iba a invitar a cenar. “A la noche me hizo llamar al buffet del trabajo y querían que me siente al lado de él. Yo le dije que no, que ya me había encargado comida y me insistía. Agarré una porción y me fui delante de todos”, siguió el relato.
Unas cinco noches después, C.R. le pidió al jefe que la devuelva al trabajo de calle y le señaló que todos sus compañeros se habían dado cuenta de la situación. Poco después, una sargento que trabajaba en ayudantía le aclaro: “Principal, el jefe ya se fijó en usted. Hizo hacer una constancia en donde ordena que se haga cargo de la guardia”. Ante esta revelación, la víctima del acoso decidió poner la denuncia: “Son comportamientos que no corresponden a un jefe”, destacó.
Durante varios meses esas actitudes por parte de su jefe continuaron. “Se quedaba parado mirándome hasta que me iba a formar. Siempre venía a la guardia y cuando salía pasaba con la música a todo volumen y el chofer decía que me la dedicaba a mí. Se mordía la boca y me señalaba. Son comportamientos que no corresponden a un jefe”, declaró la mujer.
Traslado inesperado
La policía que denunció el acoso por parte de su jefe recibió una respuesta inesperada tras su declaración: la trasladaron. Esto ocurrió luego de otra denuncia realizada por la mujer que tras vivir una situación incómoda con su jefe, sufrió otra similar.
“Me pusieron con un chofer que es problemático y atrevido con las mujeres. Me faltó el respeto, distribuía fotos mías. Le dije al oficial que no quería seguir con esta persona porque era muy violento, pero no sabía que era amigo del jefe. El oficial parece que le dijo al jefe y me mandaron a Grand Bourg, que es una zona muy alejada de mi domicilio. Mi compañero, el atrevido, seguía ahí. Incluso me quiso empujar y me amenazó de muerte por la denuncia que hice”, sostuvo.
Ante esta última situación, el juzgado ordenó una perimetral como medida cautelar, pero los denunciados no la cumplieron. “Mis compañeros me decían: ‘tenga cuidado porque el jefe está buscando cómo hacerla caer’”. Luego agregó que habló con la Oficina de la Mujer, pero no obtuvo respuestas. “Me dijeron que el jefe de esa área es muy machista y tapaba todos estos casos”, agregó.
Castigo
La policía víctima de acoso explicó que la situación no quedó ahí. El 1 de mayo, un compañero suyo le informó que habían preparado un informe falso para provocar su traslado. Compañeros suyos reconocieron haber sido forzados por el jefe a confeccionar informes en su contra.
En la denuncia realizada por C.R. consta que una suboficial redactó un informe en el que acusa a la víctima de omitir el secuestro de elementos de prueba en un operativo de microtráfico, bajo amenazas.
Ante toda esta situación, la suboficial pidió la carpeta psiquiátrica y le diagnosticaron estrés agudo. “Me perjudicaron personal y laboralmente. Yo tengo muy buenos procedimientos, no salía a pasear en el móvil, pero la actitud del jefe me desmotivó y me marcó un límite”, explicó.
Antecedentes
El comisario la que denunciaron tiene antecedentes por acoso en otras áreas en las que prestó servicio. Esta información, disponible en los registros de la Oficina de la Mujer, no fue un impedimento para que el denunciado siga abusando de su poder.
“Desde la policía no se tomaron medidas. Cuando hay una denuncia contra un personal, lo suspenden o le quitan el arma, pero él sigue trabajando normalmente. Tiene mucho respaldo político. Ningún abogado quería tomar mi caso”, finalizó.
Fuente: Cuarto Poder.