Una mujer presentó una demanda contra una cadena de comida rápida por una ensalada que, según ella, contenía un trozo del dedo humano, y no solo alega que el dedo estaba mezclado en su comida, sino que llegó a masticarlo al no darse cuenta.
Según la demanda, Allison Cozzi compró una ensalada en un local en Nueva York, y mientras la comía se dio cuenta de que estaba masticando una porción de un ingrediente duro y fibroso, que había sido mezclado y formado parte de la ensalada.
De acuerdo a medios locales, una gerente del restaurante se cortó accidentalmente un trozo de su dedo índice izquierdo mientras cortaba las verduras. La demanda afirma que Cozzi sufrió “lesiones personales graves, entre ellas: shock; ataques de pánico; migraña y exacerbación de la migraña; deterioro cognitivo; estrés traumático y ansiedad, náuseas, vómitos, mareos; y dolor de cuello y hombros”.
El departamento de salud del condado de Westchester investigó la ubicación del restaurante poco después del incidente y le impuso una multa de 900 dólares. Pero Cozzi dice en su demanda que la multa no le impidió sufrir las diversas consecuencias personales de la experiencia traumática.
¿Qué dice la demanda?
La demanda acusa a la cadena de restaurantes de ensaladas y a su empresa matriz, de negligencia y “violaciones legales”, y solicita una cantidad no revelada por daños y perjuicios. La versión de la mujer asegura que ese mismo día un empleado que trabajaba en el restaurante estaba cortando verdura y se mutiló una porción de su dedo índice izquierdo.
El empleado fue trasladado de urgencia a un hospital local, pero dejó el material biológico en la cocina, y la parte del dedo llegó a la ensalada de Cozzi y finalmente a su boca, según la demanda.
Hay que resaltar, que esta no es la primera vez que un cliente supuestamente encuentra un dedo humano en su comida. En 2016, una mujer embarazada de California presentó un reclamo diciendo que encontró la yema de un dedo ensangrentada en una ensalada en un restaurante en Paso Robles.
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En 2012, un adolescente de Michigan dijo que encontró un dedo, incluido un nudillo, cuando mordió su sándwich de rosbif. En 2010, una mujer de Florida demandó a la empresa después de que supuestamente encontró la punta cortada de un dedo humano en su ensalada verde de pollo frito.