A través de una carta en las redes sociales, Nicolás Domingo se despidió de Patronato, club para el que jugó durante la última temporada. Este lunes fue el último partido oficial de la institución en el año y el jugador ya no continuará en el club -su contrato es hasta diciembre-.
En su misiva, el futbolista lamentó no haber cumplido el principal objetivo que se había impuesto la institución: ascender. “Me voy en paz por haberlo intentado de verdad”, indicó. Luego agregó: “Elijo quedarme con la mitad del vaso lleno y seguir aprendiendo y creciendo”.
Aseguró que guardará en su corazón a la institución y a las personas que allí trabajan. Agregó que también conservará a muchos de los compañeros que tuvo en el club como amigos a quienes dijo: “Les deseo lo mejor para lo que venga, siempre para adelante hasta el final”.
Dejó un agradecimiento a los hinchas de Patronato por acompañarlos durante el año. “Estuvieron siempre ahí, sobre todo cuando las cosas no salieron como todos queríamos”, valoró. Y cerró con una mención a la ciudad de Paraná: “Nos sentimos muy cómodos y queridos, sin dudas que disfrutamos mucho de esta linda ciudad”, dijo en referencia a él mismo, su pareja y su hija.
“¡Hasta siempre Patrón! Sé que vas a volver”, concluyó Nicolás Domingo en la carta en la que se despidió de Patronato.
Los números de Domingo
El experimentado mediocampista nacido en Totoras, Santa Fe, el 8 de abril de 1985, jugó 43 partidos durante la temporada con el Rojinegro. No convirtió goles, pero asistió en dos ocasiones. A lo largo de la temporada recibió 17 amonestaciones y fue expulsado una vez.
En el desglose de los encuentros se descubre que jugó 34 partidos en la Primera Nacional, dos en Copa Argentina, dos en Copa Sudamericana y cinco en Copa Libertadores.
De los 46 partidos que jugó el Patrón durante el año, Domingo estuvo presente en 43, siendo fundamental tanto para Walter Otta como para Rodolfo De Paoli. Incluso jugó los encuentros bajo el mando de Gabriel Graciani en sus interinatos.